Hoy es 23 de abril, Día del Libro y también la festividad de Sant Jordi, que en Cataluña se celebra regalando un libro y una rosa a nuestros más allegados. Se trata, por tanto, de una fecha muy señalada para el mundo de la literatura y que sirve para poner en valor el papel que la lectura tiene y debe tener en nuestra sociedad. Pero, cada vez más, este día ve cómo se van sustituyendo las viejas hojas de papel por los unos y ceros de los dispositivos electrónicos y cómo las voluminosas novelas van dejando paso a ligeros y cómodos tablets y eReaders.
No en vano, un informe de The Guardian afirma que para 2018 el eBook podría sobrepasar al libro impreso como formato preferido para la lectura a nivel internacional, debido en parte a la llegada de las nuevas generaciones nativas digitales y, por otro lado, a la enorme penetración de los dispositivos digitales que permiten leer en ellos en nuestra sociedad.
De hecho, en países como Estados Unidos, el 50% de la población –según datos de Pew Internet & American Life Project– ya lee de forma habitual con su tableta o eReader, no sólo libros sino también noticias y periódicos. En nuestro país, el último Observatorio de la Lectura y el Libro detectó un aumento de la lectura digital de más de 10 puntos porcentuales en los últimos tres años, hasta alcanzar un índice del 58%, por lo que podríamos decir que seis de cada diez lectores lo hacen en soporte digital. Asimismo, “el formato digital es el único subsector de la industria del libro que ha crecido en los últimos tiempos: un 8,1% en comparación con el ejercicio anterior y un 13,9% en los últimos cuatro años”, añade Álex Fernández, Publishers Relations en 24symbols, aludiendo a los datos más recientes hechos públicos por la Federación de Gremios de Editores de España.
España: tenemos la tecnología, nos falta el contenido
Nuestro país es uno de los que mayor penetración de dispositivos aptos para la lectura digital posee de toda Europa. Ya en 2013, en España estaban en la calle más de 9 millones de dispositivos con los que se podían leer libros en soporte digital.
Sin embargo, el porcentaje de libros digitalizados respecto al de libros editados no es de los mayores en la Unión Europea. Y es que, según el último Observatorio de la Lectura y el Libro, por cada 100 libros publicados en España solo 23 son digitales, mientras que por cada 100 euros facturados en el sector del libro, solo 3 proceden de los libros digitales. “En estos dos aspectos Reino Unido, Alemania e Italia están por delante de España”, admite Álex Fernández.
El reinado de Amazon
El mercado de la lectura digital en venta unitaria (esto es, la comercialización de un eBook concreto sin estar sujeto a un plan de suscripción o similar) es coto privado de Amazon. No en vano, un informe de BISG afirma que la cuota de Amazon en Estados Unidos es cercana al 67%, aunque no es el país en que más dominio ejerce: en Reino Unido posee el 79% del mercado, según otro estudio de Ofcom.
En el caso español, la cifra baja hasta el 40% de ‘market share’ pero eso no quita para que la empresa de Jeff Bezos posea una imponente posición de dominio sobre la industria editorial (tanto a nivel de dispositivo –Kindle– como de plataforma de venta) que ha provocado ya las quejas de los editores y autores en el Viejo Continente y que, con lo antecedentes de otros actores destacados del sector TIC como Microsoft o Google, acaben en sanciones por abuso de posición dominante contra Amazon. En ese sentido, muchos agentes de la cadena de valor del eBook han denunciado presiones a la hora de establecer los precios de las publicaciones, así como criterios arbitrarios a la hora de seleccionar los libros más destacados en cada momento.
Las tarifas planas: la última moda de la lectura digital
“La suscripción se está convirtiendo en una especie de estándar para el consumo de contenido en Internet: Netflix (películas y series), Spotify o Deezer (música), Audible (audiobooks), Xbox Live (videojuegos)”. Así explica Álex Fernández el auge de los modelos de tarifa plana en todas las categorías de contenidos digitales y entre las que los libros no son una excepción. Por ello, en los últimos años hemos visto proliferar todo un sinfín de propuestas en el segmento de la suscripción de eBooks en todo el mundo: desde Scribd y Oyster en Estados Unidos hasta Brasil, con Nuvem de Livros; pasando por Alemania con Skoobe y Readfy o en Rusia con BookMate.
Curiosamente, España es el país donde más de estos servicios de tarifa plana están disponibles, nada menos que siete de las plataformas líderes a nivel internacional: 24symbols, Nubico, Kindle Unlimited, Skoobe, Nube de Libros, BookMate y Scribd.
Nubico es una de ellas. Nacida en 2013 de la mano de Telefónica y Círculo de Lectores, este ‘Spotify de los libros’ permite acceder actualmente a más de 11.000 eBooks y cerca de 40 revistas a cambio de una cuota mensual de 8,99 euros al mes. Esta plataforma permite que una familia entera (hasta cinco personas) puedan leer pagando con una sola suscripción y con su biblioteca sincronizada en todos los dispositivos que utilicen (tablets, smartphones, eReaders BQ y PC).
Su director general, David Fernández, explica a TICbeat que la lectura digital y el papel son complementarias, no sustitutivas: “Nuestra apuesta por el mundo eBook llega de la mano de los avances tecnológicos como la tecnología cloud, pero no implica una desaparición del mundo físico”. Asimismo, el directivo asegura que, dentro de la multitud de modelos que están pugnando por liderar esta industria, el de la suscripción es el que se está consolidando como la alternativa a tener en cuenta. “Desde Nubico apostamos por esta fórmula que es la que más está creciendo y en la que Nubico se está consolidando como referente de la lectura digital en suscripción. Creemos que bajo este modelo es posible ofrecer al usuario una oferta atractiva con una propuesta de valor sostenible para todos los agentes del proceso editorial”, afirma.
24symbols es otro de los servicios que, desde 2010, permite leer de forma ilimitada con un pago mensual fijo y, en este caso, permiten además leer una serie de títulos de forma totalmente gratuita (financiado con publicidad) tanto en tablets y smartphones como en PC. La compañía española (que pertenece al mismo grupo que ZED o que el centro universitario U-Tad) cuenta con más de 200.000 eBooks en su catálogo y acaba de firmar recientemente un acuerdo con Internet.org, la iniciativa de Mark Zuckerberg para democratizar el acceso a Internet y los contenidos digitales en todo el mundo. Pasos que han permitido a 24symbols estar cerca de llegar al millón de usuarios registrados en todo el planeta, cifra que esperan alcanzar y superar durante 2015.
Equipo actual de 24symbols en su sede de Madrid.
Por otro lado, el pasado año llegó a España Kindle Unlimited, la propuesta del gigante norteamericano Amazon que ofrece acceso a más de 700.000 títulos por 9,99 euros al mes. Su gran aliciente es, sin duda, la posibilidad de disfrutar de los libros en el Kindle de toda la vida, el eReader más extendido en todo el planeta. Sin embargo, la cifra de eBooks que ofrecen es algo engañosa, ya que tan sólo 25.000 de ellos son en castellano y la inmensa mayoría de ellos son autoediciones, mientras que no cuenta con los títulos de las grandes editoriales de nuestro país.
La piratería: el reto pendiente del sector
Como afirma Álex Fernández, de 24symbols, uno de los grandes desafíos que le quedan por delante a la lectura digital es “hacer frente a la piratería todos juntos y convencer definitivamente al sector editorial que la lectura digital no ‘atenta’ contra el modelo tradicional de venta de libros y las ediciones impresas, sino que es un canal nuevo de venta, mediante el que alcanzar nuevos lectores con hábitos de lectura diferentes”.
En ese sentido, Fernández alude asimismo a que “la piratería en general y la idea de que los contenidos digitales consumidos por Internet son o tienen que ser gratuitos es una realidad que nos hace mucho daño y repercute directamente en la idea que tiene el propio sector editorial de nosotros”.
Cabe destacar que la piratería de eBooks no es un tema baladí, sino que supone importantes pérdidas para la industria editorial y para la sociedad en general. De hecho, alrededor del 5% del PIB europeo lo producen las industrias culturales (no sólo libros, sino también música, cine o prensa), que a su vez genera el 4% del PIB español y el 3,1% del empleo en nuestro país.
